Eterna

 El tiempo no corre. Para mí aquel reloj ha cesado su ritmo y se encuentra esperando, quieto, buscando un nuevo pasatiempo. En cambio, para ti ha duplicado su marcha y te consume, furioso.

En mí ya nada funciona, porque soy eterna en esos brazos tuyos, en cada copa vacía y esas palabras sin sentido. Soy eterna en tus pensamientos y ya nada puedes hacer para salvarte de mis euforias 

El tiempo corre y te deja muerto aunque respiras, te abate y no se por qué no te estás resistiendo. No se por qué mantienes esa botella en tu mesa, no se por qué esa cosecha lleva mi nombre y es tan añeja. No entiendo por qué mi canción favorita suena de fondo y me parece tan melancólica.

Yo no quiero vivir en esos pensamientos, en estas horas vacías, pero no me ayudas hundido en tantas cajas de cigarrillos. No quiero estar en esta habitación descuidada que está llena de nuestros recuerdos, realmente no me gusta esconderme entre el polvo de aquel rincón... Pero me estás obligando a estar presente.

Estoy aquí porque lees mis cartas a diario y llamas mi número para escuchar mi voz en el tono, sigo en esa asquerosa pulsera que jamás te quitas y en la plumilla que usas para tocar mis canciones favoritas. Sigo aquí porque sigues sin dejarme tranquila, me piensas y dices mi nombre más de 10 veces por día.

Sigo aquí por ti, porque si de mí dependiendiera solo estaría balanceadome con el viento y revolcandome en la hierba que creció al rededor de mi lápida. Pero sigo aquí, porque tú ya me hiciste eterna y ninguno va a llegar a ningún sitio, ninguno va a salir de aquí hasta que el reloj marque la hora exacta.






~Rain.



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